Las penurias y adversidades que azotan a la pequeña huérfana Nell Trent y a su bondadoso pero débil abuelo en su vagabundeo por Inglaterra bajo la persecución del usurero Daniel Quilp, uno de los villanos más acabados y odiosos de toda la obra del autor, son el hilo conductor de "La tienda de antigüedades". Charles Dickens consiguió alumbrar en estas páginas algunos de sus más inolvidables personajes a la vez que desarrollar una novela que, publicada por entregas, causó furor en su época.