Multiculturalismo es el nombre con el que, en el ámbito europeo, se designa en la actualidad un complejo de problemáticas que remite a la presecia, dentro de las homogeneidades nacionales y sociales, de diferencias culturales aportadas por los inmigrantes de distintas etnias y religiones. Se pone en cirsis la capacidad integradora del Estado continental, de sus instituciones y sus culturas políticas, de su ordenamiento jurídico, de su orden fuertemente unitario. Al plantear cuestiones concretas -que se relacionan, por ejemplo, con la escuela, el matrimonio, el papel de la mujer en la familia y en la sociedad, el empleo de los símbolos religiosos-, el multiculturalismo implica hoy para nuetras democracias un desafío ecisivo, porque nos obliga a experimentar y a imaginar una convivencia social, civil y política bastante más variada que la que tradiconalmente han conocido los Estados occidentales. Este volumen examina el fenómeno desde una multiplicdad de puntos de vista (filosófico, sociológico, político, psicológico, jurídico, cultural), unidos sin embargo por un hilo conductor: sólo reflexionando sobre -y enfrentándose con- los problemas planteados por el surgimiento multicultural se puede pensar en llegar a una solución capaz de salvar, y, más aún, de potenciar nuestra idea de democracia.