Considerada la «Décima Musa» por Platón, los fragmentos conservados de la obra de Safo son escasos y constituyen una muestra fundamental de la primera poesía europea. Siendo ya en su época una autoridad, los siglos la han situado como un referente de la literatura femenina que ha inspirado por igual a hombres y mujeres. Los textos que nos quedan de su obra atestiguan una sensualidad intensa y delicada que canta los dolores y la alegría de la pasión amorosa. «...y cuando ríes seductora. Entonces el corazón me tiembla dentro del pecho, pues en cuanto te miro no me sale ni un hilo de voz.»