su compra


0 libro(s) - AR$0.00 Euros Dólares US
0 libro(s) - U$S0.00 Euros Pesos
0 libro(s) - €0.00 Pesos Dólares US
Usuario: Clave:
Registrarse
Facebook Twitter sábado 23 de noviembre del 2024 23-11-2024
Tapa del libro PENSAMI E AMAMI

PENSAMI E AMAMI

La historia de una familia entre Roma y Buenos Aires

Ver Biografía

Disponible Disponible

Autor: CESARONI, CLAUDIA ROSANA

Origen: Argentina

Editorial: TREN EN MOVIMIENTO

ISBN: 9789873789793

Origen: Argentina

$ 12000.00 Icono bolsa

12.00 U$S 13.33

Cuándo comienza a escribirse un libro? ¿Cuándo, el deseo, se hace escritura? Tengo una respuesta para estas preguntas, y se la robé al enorme periodista e investigador Rogelio García Lupo. Alguna vez le leí decir que cuando los papeles, anotaciones, copias de expedientes, fotos, legajos y libros sobre un tema se amontonan en cajas, escritorios y estantes, es hora de sentarse a escribir. Así lo hice cada vez que eso me sucedió. Así escribí libros sobre cárceles, sobre hechos brutales del pasado reciente, sobre una experiencia militante, personal y colectiva, sobre niños con sus padres presos.
El punto es que, en este caso, además de documentos e imágenes, se amontonan olores, sabores, risas, palabras, secretos, viajes al origen, acentos, recetas guardadas como tesoros, la sangre que me corre por las venas. Soy yo, de niña, escuchando hablar un idioma que no termino de entender. Es mi padre, las mañanas de domingo, haciendo fuentes de frappe que descubro al despertar pero huelo antes, semidormida.

Son unos días, quizá solo un día al año, el último de los días de cada año, en que somos aquello que más nos gusta ser: una familia ítaloargentina, reunida en una casa grande, en una localidad pegada a las vías del tren de un partido del sur del conurbano. Comemos, bebemos, corremos y gritamos los más chicos, que a los pocos años ya dejamos de serlo y cuidamos a los nuevos, a los hijos de los hijos de los hijos, a las hijas de las hijas de las hijas. Nace ahí, quizá, esos 31 de diciembre en la calle 25 de mayo 25 de Bernal, el deseo de contar.

O tal vez en junio de 1990, unos meses después de la muerte de mi padre, cuando llego a Roma y escribo en mi agenda: Llegué, viejito. O muchos años después, cuando ya soy abuela, vuelvo a Roma y visito la casa donde vivieron ellos, y llevo a Franco y a Silvano chiquitos en una foto, para que vuelvan a su hogar.
O en esa reunión familiar en la que los primos mayores traen cartas y notas del nonno, y descubro una en la que le dice palabras bellas a la nonna, y se despide pidiéndole que lo piense y que lo ame.

O cuando me entero de que debió dejar su país por ejercer la solidaridad sin medir las consecuencias, y me encuentro orgullosa entre quienes nos reconocemos en esa herencia.

Quizá el deseo nazca, otra vez, de la necesidad de reunir piezas de un rompecabezas. Somos herederas y herederos de un hombre y de una mujer valientes, de dos personas locamente enamoradas. Hemos aprendido que preparar el alimento es un modo de amar. Coraje, pasión y cocina ¿cómo no intentar contarlo?

Eso es Pensami e amami.

Un intento de ofrenda, especialmente para Orietta, Liliana, Franco, Silvano, Jorge y Luana. Y para cada uno y cada una de quienes andamos por el mundo llevando un poquito de Ada y de Umberto y de Olga. De esa tríada elijo tomarme para contar.

Al final, como hacía Orietta cada vez que comíamos sus delicias, voy a preguntarles: “¿Y? ¿Cómo está?”

Esperando, claro, siempre, una sola y misma repuesta.

Ojalá les guste también, ojalá esté rico para ustedes.


Claudia Cesaroni.

Afinidades electivas
Otros libros del autor