¿Por qué la evocación en torno de las víctimas de la guerrilla implica siempre de manera explícita o velada una reivindicación de la última dictadura militar? Partiendo de cuatro casos emblemáticos de víctimas atribuidas a la guerrilla -Argentino del Valle Larrabure, Pedro Eugenio Aramburu, Jordán Bruno Genta y José Ignacio Rucci-. Germán Ferrari indaga en las relaciones entre estos personajes y la aparición de un nuevo discurso que equipara el terrorismo de Estado con las acciones de las organizaciones milicianas. Los casos elegidos reúnen todos los elementos necesarios para ensayar una respuesta a ese interrogante crucial ante la construcción de un futuro sin lastres de autoritarismo. Fueron símbolos para la última dictadura y son fantasmas que aún acosan a esta democracia imperfecta. A través de testimonios, archivos periodísticos y documentos judiciales, entre otras fuentes, el autor de esta investigación bucea en el resurgimiento, en los últimos años, de la denominada "teoría de los dos demonios", a partir de la reapertura de los juicios a represores del régimen que imperó en el país entre 1976 y 1983. Y analiza la estrategia desplegada por diversos sectores del centro a la derecha para calificar como "crímenes de lesa humanidad" a los atentados de la guerrilla. Símbolos y fantasmas demuestra cómo detrás del lema "justicia para todos" se oculta una realidad más compleja, en la que se mezclan el dolor y el oportunismo político.