El desierto de Atacama es el mirador más grande del planeta tierra. Todo desierto en la antigüedad fue océano. Encontraron una piedra. Una gota de agua adentro de un cuarzo fosilizado. A partir de ahí comienza. La función que tuvo el desierto. Una relación al agua como elemento primordial. En el centro hay una gota de agua que es una burbuja de oxígeno. Ir en búsqueda. ¿De dónde sacar una gota de agua para que se sostenga la vida? Sin eso no hay existencia. Hay castración pero hasta que no se pone en funcionamiento, estás en desierto. El desierto de la sequedad, también afectiva. La gota de agua, la vacuola, el microbio, lo no mortificado, lo que no se puede terminar de asir, lo que se escurre. Una hilacha, una mínima materia textil, textual, con la que hilar una vida. Un soplo. Una letra. Un respiro. Silvana Tagliaferro despliega en este libro la lógica velada de una experiencia psicoanalítica que se orienta en la compleja búsqueda de alguna huella de vida, ahí donde todo imaginario humano está enraizado.