De los cinco contendientes al poder, uno está muerto y otro está en desventaja; aun así, las guerras arrasan con más violencia que nunca, a la vez que las alianzas se hacen y se deshacen. Joeffrey, de la Casa Lannister, se sienta en el Trono de Hierro: se ha coronado ya como el gobernante de la tierra de los Siete Reinos. Su rival más acérrimo, lord Stannis, yace derrotado y en desgracia, víctima de la celosa hechicera que lo mantiene cautivo en su prisión demoniaca. No obstante Robb, de la Casa Stark, es aún amo y rey de Invernalia, y conspira contra sus más odiados enemigos, los Lannister, incluso a pesar de que mantienen a su hermana cautiva en Desembarco del Rey, donde se encuentra el Trono de Hierro. Mientras tanto, abriéndose paso a través de un continente desangrado, se encuentra la reina exiliada, Daenerys, dueña de los únicos tres dragones que existen en el mundo. A medida que fuerzas opuestas se preparan para el gran enfrentamiento final, un ejército de bárbaros y salvajes irrumpe desde más allá del umbral de la civilización. Al frente de esta fuerza armada se encuentra una horda de los míticos Otros -un ejército sobrenatural de muertos vivientes cuyos inertes cuerpos son imparables-. Mientras el futuro de estas tierras pende de un hilo, nadie descansará sino hasta que los Siete Reinos exploten en una auténtica tormenta de espadas.