La crueldad que recorre estas páginas no es aquella que sorprende la rutina apacible del lector desde las crónicas policiales, como la del asaltante que agregó al robo una puñalada innecesaria o la del depravado que asesinó a una pareja de ancianos. Aquí se trata de un puñado de historias soportadas o convalidadas por conductas culturales que recorren de arriba abajo la sociedad, involucrando, también, a sus instituciones, y no suelen tener no supieron, al menos, tener en su momento reproche ni reparación; más aún, fueron justificadas y, a veces, premiadas. Así que puede decirse que esta selección constituye, en realidad, un esbozo para una literatura de la impunidad. Y no resulta casual que si se inaugura con el célebre texto de Echeverría concluya con dos relatos situados en los terribles años de la última dictadura militar argentina.
La colección Libros Ilustrados entrega una literatura que va desde los clásicos a los contemporáneos en una suerte de renovada puesta en valor mediante expresivas ilustraciones y una cuidada edición. Incluye entregas por autor y selecciones temáticas.