Durante toda su vida, Yukiko ha escondido un terrible secreto: la mañana del 9 de agosto de 1945, antes de que se lanzara la bomba sobre Nagasaki, mató a su padre. En una carta que le deja a su hija justo antes de morir confiesa el crimen y revela que tiene un hermanastro. Pronto se descubrirá que no solo Yukikoguardaba secretos inconfesables. Y así, las historias personales van entrelazándose con los acontecimientos históricos: la Segunda Guerra Mundial, los conflictos con Corea, el terremoto de 1923. Las generaciones se suceden al tiempo que emerge un retrato fascinante de la sociedad japonesa, con su cultura y sus contradicciones. De fondo, la naturaleza, presencia constante y discreta, delicada y elegante como la escritura de Aki Shimazaki: el viento que acaricia una mejilla, las nubes en un sofocante cielo de verano, las luciérnagas volando sobre un arroyo, la hierba azul, las camelias en el bosque de Nagasaki. Un estilo refinado y sencillo, unas veces poético, otras sensual, con el que la autora afronta dramas privados y universales y a través del cual hasta la historia más oscura termina por resultar misteriosa y ligera. La crítica ha dicho... «Una lección de estilo.» Giorgio Amitrano, Il Corriere della Sera