Escritor, poeta y crítico estadounidense, más conocido como el primer maestro del relato corto, en especial de terror y misterio. Nació el 19 de enero de 1809 en Boston. Hijo de Elizabeth Arlold Poe y David Poe, actores de teatro itinerantes, sus padres murieron cuando él era todavía un niño.
A lo largo de su corta existencia supo de cerca lo que era la miseria y también la riqueza. Su madre fue una actriz de teatro que representó a Ofelia y Cordelia de Shakespeare, y trabajó sobre el escenario hasta pocos días antes de dar a luz, muriendo dos años después de su nacimiento víctima de la tuberculosis.
Edgar Allan Poe fue educado por Frances y John Allan, un acaudalado hombre de negocios de Richmond (Virginia), que probablemente fue su padrino, y de 1815 a 1820 vivió con éste y su esposa en el Reino Unido, donde comenzó su educación en un internado privado. El matrimonio no había dado niños, y Frances Allan le crió como si lo hubiera engendrado. El padre, en cambio, no quiso nunca adoptarlo legalmente, pero con el tiempo llegó a encariñarse bastante con él. John Allan había tenido varios hijos fuera de su relación con Frances y costear sus gastos y los de Edgar era suficiente para no querer comprometerse legalmente.
En su infancia, Edgar Allan Poe inventaba ascendencias fantásticas que mostraban ya su peculiar pensamiento. A los cuatro años, el niño deleitaba a las visitas con apasionadas recitaciones de largos poemas de Walter Scott y otros autores de moda. Su educación fue cuidadosa y típicamente sureña. De los negros aprendió el valor del ritmo, que haría mágica su poesía, y las leyendas del mar que escuchaba en los relatos truculentos de los marinos que negociaban con su padre. Durante su adolescencia ya escribía poemas con influencias de Byron.
Destacado estudiante, pero acomplejado interiormente por sus carencias familiares, intentaba compensar su complejo de inferioridad con una exacerbada competitividad que le llevaba a realizar proezas como nadar seis millas contra corriente en el río James. Era también una forma de emular a Byron, su mayor modelo literario, cuyo estilo guiaba sus propias composiciones poéticas.
Cuando regresó a Estados Unidos en el año 1820 continuó estudiando en centros privados y asistió a la Universidad de Virginia durante un año. Académicamente, no tenía rival. Su dominio de las lenguas clásicas era absoluto, su inteligencia le permitía incluso estudiar mientras escuchaba una conversación y leía vorazmente sobre historia, naturaleza, matemáticas, astronomía y mucha literatura.
En 1827 su afición al juego y a la bebida le acarreó la expulsión y su padre adoptivo se negó a pagar sus deudas y le obligó a trabajar como empleado. Abandonó poco después su trabajo y viajó a Boston, donde publicó anónimamente su primer libro, Tamerlán y otros poemas (Tamerlane and Other Poems, 1827).
Se alistó luego en el ejército, en el que permaneció dos años. En 1829 apareció su segundo libro de poemas, Al Aaraf, y se reconcilió con su padre adoptivo, que le consiguió un cargo en la Academia Militar de West Point, de la que a los pocos meses fue expulsado por negligencia en el cumplimiento del deber. Su padre le repudió para siempre.
En 1832, y después de la publicación de su tercer libro, Poemas (Poems by Edgar Allan Poe, 1831), se desplazó a Baltimore, donde vivió con su tía y una sobrina de 11 años, Virginia Clemm. En 1832, su cuento Manuscrito encontrado en una botella ganó un concurso patrocinado por el Baltimore Saturday Visitor.
En 1836 contrajo matrimonio con su jovencísima sobrina, que por entonces contaba sólo catorce años de edad. Por esta época entró como redactor en el periódico Southern Baltimore Messenger, y más tarde en varias revistas en Filadelfia y Nueva York, ciudad en la que se había instalado con su esposa en 1837.
Entre la producción poética de Poe destacan una docena de poemas por su impecable construcción literaria y por sus ritmos y temas obsesivos. En El cuervo (1845), por ejemplo, el autor se siente abrumado por la melancolía y los augurios de la muerte. Su dominio extraordinario del ritmo y el sonido es particularmente evidente en Las campanas (1849), un poema que evoca el repique de los instrumentos metálicos, y El durmiente (1831), que produce un estado de somnolencia. Escribió además Lenore (1831) y Annabel Lee (1849). Su obra poética refleja la influencia de poetas ingleses como Milton, Shelley y Coleridge.
Su trabajo como redactor consistió en buena parte en reseñar libros, escribiendo un significativo número de críticas. Sus ensayos se hicieron famosos por su sarcasmo, ingenio y exposición de pretensiones literarias; son valoraciones que han resistido el paso del tiempo situándole entre los mejores críticos literarios estadounidenses. Sus teorías sobre la naturaleza de la ficción y, en particular, sus ensayos sobre el cuento, han tenido una influencia duradera en escritores americanos y europeos. Uno de sus relatos más famosos es El escarabajo de oro (1843).
Fue autor además de Los crímenes de la calle Morgue (1841), El misterio de Marie Rogêt (1842-1843) y La carta robada (1844) están considerados como los predecesores de la moderna novela de misterio o policiaca. Además de su soberbia construcción argumental, la mayoría de sus cuentos sobresalen por la morbidez de su inventiva.
Entre sus cuentos sobresalen La caída de la casa Usher (1839), El pozo y el péndulo (1842), El corazón delator (1843) y El barril de amontillado (1846). En el año 1847 falleció su mujer y él mismo cayó enfermo.
El 3 de octubre de 1849 se celebraban en la ciudad de Baltimore unos comicios. Poe como un vagabundo más, se acercó a esta población para recibir el dinero que la chusma de borrachines recibían a cuenta de ciertos partidos por depositar un voto a su favor. El dinero que posiblemente necesitase el autor para emborracharse no lo llegó a cobrar nunca. Fue hallado semiconsciente tirado en la calle. Llevaba puestas ropas harapientas que ni siquiera eran suyas. Fue ingresado en el hospital y cuatro días más tarde falleció en medio de terribles delirios e incesantes imágenes de terror que acosaban su mente agotada. Su adicción al alcohol y las drogas contribuyeron a su temprana muerte, el 7 de octubre de 1849.