La RESILIENCIA no supone recuperar lo perdido o recobrar el estado anterior de bienestar. Sabemos que después de un golpe fuete nada es igual; pero a partir de la resiliencia, lo nuevo también puede ser positivo. RESILIENCIA significa no quedarse en la carencia; sino crear algo bueno, algo funcional, algo positivo a partir del dolor. ¿Cómo potenciar la capacidad de recuperación de los hijos ante la adversidad o el dolor? La reconocida psicóloga Julia Borbolla ha hecho una novedosa y práctica adaptación del tema de la RESILIENCIA a las labores de crianza y educación para amplificar la resistencia de los padres e hijos con el fin de aunque puedan percibirse a sí mismos como personas capaces de superarse frente a una enfermedad, una carencia económica, la muerte de un ser querido, un fracaso escolar o simplemente una frustración por no tener el juego o equipo electrónico de moda. Es un manual práctico con estrategias comprobadas para que nuestros hijos (y nosotros mismos) seamos más fuertes para enfrentar la vida y sus inevitables penalidades y así salir fortalecidos de la adversidad. Una lectura indispensable para cualquiera que educa niños y adolescentes.