Roland, Eddie y Susannah forman una banda cada vez más unida y más preparada. Los tres han asumido su misión de salvar la Torre Oscura y Roland les entrena para ser pistoleros. Para completar el ka-tet tendrá que traer desde Nueva York al chico Jake que Roland dejó atrás en el primer libro, un chico que ya ha muerto dos veces. Con la ayuda de una llave que Eddie, esculpirá en madera, Jake conseguirá abrir la puerta para juntarse con ellos. Y a Jake se unirá quien será su fiel mascota, un bilibramo llamado Acho. Acho le salvará la vida más de una vez. El Ka-tet está completo y juntos emprenden unos de sus viajes más peligrosos. Llegan al país de Lud, una tierra rota de cemento y edificios en ruinas, habitada por dos pueblos enemigos y desesperados. Para el Ka-tet la única forma de salir de allí será con un tren enloquecido llamado Blaine que les transportará miles y miles de kilómetros en pocos horas. Sin embargo este tren es un ser psicótico más empeñado en destrozar a sus viajeros que llevarles a su destino. También es un tren dedicado a las adivinanzas y si no dan con la respuesta correcta su destino será la muerte.