La historia nos remonta a año siete mil setecientos antes de Cristo, en que tiene lugar la increíble alianza entre Kildon, chamán de las montañas, y Evlex, la primera Rosa de Jericó, una planta cuyo origen todavía hoy se desconoce. Esta leyenda fraguó #mucho antes de la aparición de las religiones- un primer pensamiento místico en el hombre: la consciencia del alma y sus diferentes manifestaciones. Con el devenir de los siglos, el pueblo arameo convirtió la leyenda en tradición, llegando hasta nuestros días con la misma frescura y vigencia de aquellos tiempos. Así, La Rosa de Jericó # Evlex nos revela de dónde parte la leyenda de Moisés y las Rosas; cuál fue la señas que dio al rey David la victoria contra los temibles jabuseos; por qué Salomón o la reina de Saba enviaban costosas expediciones para buscar la Rosa en los desiertos. Nunca pudo el hombre imaginar que una humilde planta fuera capaz de convertirse en un símbolo universal de amor sublime y que su historia sorteara incólume las diferentes culturas y religiones a través de los tiempos.