En el panorama de la narrativa castellana renacentista, poblado de(*CR*)hechos heroicos, caballeros andantes, pastores idealizados y exóticos(*CR*)temas moriscos, irrumpe a mediados del siglo XVI La vida de Lazarillo(*CR*)de Tormes y de sus fortunas y adversidades, que supone en realidad el(*CR*)punto de partida de la novela moderna. Su carácter innovador no se(*CR*)limita a la técnica narrativa, sino que concierne también a las formas(*CR*)expresivas y a la creación de un personaje literario, el pícaro, y del(*CR*)género al que da nombre, que constituye sin duda la más(*CR*)original aportación española a la literatura europea. El texto fijado,(*CR*)que toma en cuenta los datos aportados por la edición de Medina(*CR*)del Campo la última descubierta, se completa con una serie de útiles(*CR*)apéndices.