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Facebook Twitter jueves 02 de mayo del 2024 02-05-2024
Tapa del libro NOSOTRAS PRESAS POLITICAS 1974-1983 CON CD

NOSOTRAS PRESAS POLITICAS 1974-1983 CON CD

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No Disponible No disponible

Autor: BEGUAN, VIVIANA

Origen: Argentina

Editorial: NUESTRA AMERICA

ISBN: 978-987115843-0

Origen: Argentina

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20.00 U$S 22.22

Este libro es una obra colectiva de 112 mujeres que fueron presas políticas y estuvieron en cárceles de distintos puntos del país entre 1974 y 1983. Su originalidad radica también en el intento de contar la vida cotidiana de esas mujeres, de la que por supuesto no estaba ajena la política, a través de los recuerdos, cartas y dibujos que fueron gestándose entre rejas. Aquí adelantamos algunos fragmentos de un material valiosísimo que estará disponible la semana próxima en las librerías y será presentado el 28 de abril en la Feria del Libro.





En estas páginas contamos nuestra experiencia como presas políticas en la cárceles del país durante el período contenido entre los años 1974 y 1983.



Poco tiempo después del golpe de Estado de 1976, y como parte del plan de "aniquilamiento de la subversión", los militares concentraron en el penal de Villa Devoto, en Buenos Aires, Argentina, a las mujeres que nos encontrábamos detenidas en las unidades penitenciarias de todo el país. Su objetivo fue disponer de nosotras según sus necesidades políticas y convertirnos, de esa manera, en rehenes. A partir de ese momento esta cárcel pasó a ser el lugar en el que permanecimos la mayor parte del tiempo y que, por estar situada en la Capital Federal, fue utilizada por la dictadura para mostrar una imagen de legalidad frente a las presiones que ejercían, en ese entonces, los organismos internacionales de derechos humanos, razón por la que la llamamos "cárcel vidriera".



En ese contexto la realidad del penal encerraba una clara dicotomía: en lo formal era una cárcel con celdas prolijamente pintadas de celeste y personal que nos trataba de "señoras" y de "usted". Pero, en realidad, se trataba de un sórdido y persistente régimen opresivo cuya máxima expresión fue la sentencia de las autoridades del Servicio Penitenciario Federal cuando nos dijeron: "De aquí saldrán muertas o locas."



En este lugar, bajo estas condiciones extremas, llegamos a ser casi 1200 mujeres provenientes de Capital Federal, provincias del interior del país y países limítrofes. De diversas edades - desde 14 hasta 70 años - y diferentes condiciones sociales. Con un promedio de detención de 7 años, aunque hubo quienes estuvieron sólo algunos meses. Lili, por ejemplo, permaneció 14 años detenida: desde1974 a 1987 y fue la última presa política en salir en libertad.



El primer grupo de presas, detenidas en los años 74 y 75, tenía la característica de ser, en un alto porcentaje, militantes de distintas organizaciones políticas. Inmediatamente después del golpe militar el destino de muchas compañeras fue los campos de concentración, la desaparición y la muerte. Desde entonces, en la cárcel, convivimos estudiantes universitarias y secundarias, obreras, campesinas, empleadas, profesionales, amas de casa, artistas, docentes, maestras rurales, con diferentes niveles de compromiso y militancia. Esta composición fue el difícil inicio de la construcción de una convivencia solidaria donde la represión se instauró sin pausa, y se profundizó a partir del 76. Tuvieron que pasar varios años para que nos dieran el carácter de presos políticos "legales" a quienes nos encontrábamos detenidos en las cárceles del país. Y esto sucedió a partir de la visita realizada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA en el año 1979, que visitó las cárceles, nos entrevistó y exigió la publicación de la totalidad de los nombres de los que estábamos encarcelados.



En estas páginas relatamos cómo se fue construyendo nuestra vida, año a año; las múltiples formas de organización y creatividad a las que debimos recurrir para sobrevivir, para enfrentar dificultades y situaciones críticas, y cómo tuvimos que apelar a nuestra capacidad individual y colectiva con el solo objetivo de salir íntegras.



(...)

Se trata de nuestro libro, escrito y elaborado de manera colectiva, tal como fue nuestra vida entonces. Logrado luego de reuniones de las "memoriosas", de quienes seleccionaron las cartas, de las que escribieron sus testimonios, de las más de cien ex presas políticas que entregaron sus cartas, poemas, dibujos, relatos, y de los innumerables mensajes por correo electrónico que recorrieron no sólo nuestro territorio sino también lejanos países que son hoy morada de tantas compañeras. Esta red de recuerdos individuales y grupales permitió reconstruir en nuestra memoria y en nuestros corazones la vida en la cárcel, año tras año, día tras día.



La detención, la tortura, la desaparición y la muerte de nuestros familiares, compañeros, amigos, y el régimen al que fuimos sometidas, nos dejaron profundas marcas, diferentes en cada una de nosotras de acuerdo con la experiencia personal.



Así también nos han marcado para siempre el temor al frío, la impaciencia frente a la espera, los ruidos que nos recuerdan los candados y las rejas o el carro de la comida "tumbera", o el sonido del agua que bajaba por los caños de desagüe de las letrinas; los gritos, los golpes, los movimientos bruscos; la humedad de los calabozos con sus paredes mojadas y chorreantes, innumerables situaciones que nos resignifican la cárcel y los momentos que más nos afectaron.



Sabemos, además, que el intento de destrucción ejercido sobre nosotras ha quedado registrado en nuestras mentes, en nuestros cuerpos, en nuestros corazones; somos concientes de ello, lo llevamos a flor de piel en nuestra vida y así contamos esta historia.



La nuestra es una experiencia única en nuestro país: el momento histórico, la cantidad de mujeres detenidas por razones políticas y concentradas en un mismo penal y su resistencia, desde ese lugar, al plan de destrucción social imperante. Situación que, ojalá, no vuelva a repetirse. Aun así queremos transmitir sobre todo los valores que emergen de esa experiencia, que no tienen tiempo ni lugar, que pueden aplicarse y vivirse en cualquier circunstancia por más dura que ésta sea, y que permiten que, de todos modos, sea posible vivir con alegría.



En el año 1999 Mariana Crespo, nuestra entrañable compañera, tuvo la idea de escribir nuestra historia. Idea que fue tomada, en ese momento, por Darío Olmo, perteneciente al Equipo de Antropólogos Forenses (EAF), y por todas nosotras. Así se sentaron las bases de este libro. Hoy no contamos con la presencia de Mariana. Estas páginas son un homenaje a ella: sin su sostenida decisión de iniciar este proyecto y de reunir voluntades, con distintas necesidades, experiencias y también distintos pensamientos políticos, difícilmente lo habríamos logrado. Todas las que conocimos al "caballo loco", como la llamábamos cariñosamente, recordamos su alegría y su dedicación para limar asperezas, para escuchar, para unir hasta lo imposible. La verdad es que la extrañamos mucho.



Este libro es por ella y por nosotras.



Por nuestros familiares, que vivieron nuestra experiencia y la sufrieron en carne propia.

Por nuestros muertos y desaparecidos, a los que no olvidaremos nunca.

Por aquellos que no conocen la historia o tienen una vaga idea de lo sucedido.

Por las nuevas generaciones, por nuestros hijos.






*Más allá de las 112 presas que colaboraron con este libro. Este fue coordinado por Viviana Beguán, prologado por Inés Izaguirre, elaborado y redactado por Alicia Kozameh, Blanca Becher, Mirta Clara, Silvia Echarte, Viviana Beguán. Corrigió el estilo Verónica Cousuelo y seleccionaron el material gráfico Nora Hilb y Silvia Echarte.

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