El explosivo archivo ofrecido por Julian Assange y su organización WikiLeaks ha sido leído y reinterpretado desde diferentes ángulos, y desde cualquiera de ellos sigue revelando una trama compleja y a menudo ocultada de las relaciones internacionales. Este libro aborda en exclusividad el material inédito sobre las tensas relaciones (o acuerdos de convivencia, en algunos casos) entre dueños de medios, periodistas y editores influyentes con los gobiernos latinoamericanos y la Casa Blanca. Se lee también como un gran mapa para saber quién es quién en la red informativa de la región y cómo el periodismo, desde siempre, ha sido un agente más en la construcción del poder político. Los autores, Martín Becerra y Sebastián Lacunza, así lo explican: #Los roles se alternan y se confunden: los medios de comunicación y los políticos o diplomáticos pueden ser fuentes y recolectores de información indistintamente, retroalimentando las versiones que se originan en esos círculos herméticos. En términos de eficacia sistémica, el margen de error en la validez de la información que circula es muy alto, por la endogamia que practican los agentes protagonistas#. En la América Latina del siglo XXI, con nuevas leyes de medios y redefinición del vínculo de los gobiernos con gigantes de las telec omunicaciones y emergentes en el campo periodístico, el material diplomático de las embajadas estadounidenses resulta una crónica documental esencial de las relaciones de fuerza de este tiempo singular. Su propio contenido explica los silencios que se han registrado a la hora de difundir los cables de WikiLeaks, que este trabajo aspira a iluminar.