"Entre noviembre de 1974 y enero de 1983 viví 2215 días en el Distrito Federal de México. De esa época de argentinos que buscaban otro lugar en el mundo datan estos textos de un tiempo memorable y contradictorio, de crecimiento y nostalgia, de sentimientos y prejuicios, de dolor y color, de ternura y patetismo, enfocados desde los sentimientos antes que desde el análisis político. Cada uno de estos textos fue releído a partir de la experiencia del regreso, y luego corregido, aumentado y enriquecido con nuevos textos escritos en esta Buenos Aires del presente. El título del libro alude a una artesanía que compré en la calle, en México: un girasol de cerámica que en el medio lleva inscripta esa frase, orgullosa desde su ingenuidad. Seamos felices mientras estamos aquí ofrecía un mensaje para los argentinos que vivían el destierro partidos en dos: el cuerpo y la cabeza en el Distrito Federal y el alma y el corazón en Buenos Aires."