Pulgarcito se ha enterado de que un tal Charles Perrault quiere escribir un cuento sobre sus aventuras y se ofrece a ayudarlo. Ya anciano y jubilado, con sus cartas el diminuto aventurero irá respondiendo las dudas del escritor y contándole su historia desde que era pequeño como un poroto. Con su propia letra, Pulgarcito narrará desconoci-dos detalles de su vida familiar y confesará las travesuras que hizo siendo un niño con la altura de un pulgar. También cuenta su versión sobre el encuentro que mantuvo con los ogros, cómo conoció el mundo usando unas zapatillas fabulosas y el accidentado día de su casamiento con una princesa gigante. Pero ¿el escritor respetará lo que dicen las cartas de Pulgarcito? ¿O en su relato escribirá lo que le chismeen Hansel y Gretel, Blancanieves y otros personajes de los cuentos?