Alexéi Ivánovich, un joven de carácter inestable que vive entre la euforia y la desesperación, trabaja como tutor para un general ruso y su hijastra, que esperan con ansia la muerte de su anciana tía para heredar una gran fortuna. Una convulsa relación amorosa entre Alexéi y Polina la hijastra del general, y la visita de la tía, que descubre los planes del general y decide jugarse su dinero en el casino en lugar de dejárselo en herencia a su sobrino, hacen saltar por los aires este mundo de complicado equilibrio. Enmarcada en las salas de juego de la ficticia ciudad alemana de Ruletenburgo, «El jugador» fue escrita en menos de un mes, como consecuencia de una desesperada apuesta de Dostoievski con su editor, producto de su necesidad de pagar las deudas de juego que lo acosaban.