Para los chicos del curso, una divertida visita a un pueblo rural se convierte en
¡una maldición sin escapatoria! Salvo para Bruno y Martín, que por pelearse, se quedaron castigados en el hotel. Pero ahora, deberán unirse para enfrentar un siniestro plan. Solo así podrán liberar a sus amigos del espectro que se niega a aceptar su muerte y la del pueblo que fundó su familia. Siete amigos, una escuela, un barrio, casas misteriosas abandonadas, un cementerio olvidado
Un libro de terror para chicos y no tan chicos,
pero eso sí
¡muy valientes!